martes, 24 de octubre de 2017

LA FUENTE BAUTISMAL






Al acercarse a la fuente, que asemeja a una pila bautismal, solo acanalada en los bordes para facilitar la salida de agua. Pero tiene un espacio donde se acumula y recoge las ondas de agua y las burbujas realizadas por el pequeño surtidor. Juan queda parado oyendo el ruido de la caída de agua, al estar atardeciendo, la luz va fugándose y crea un espacio fantasmal.
Aprovecha para sentarse en un banco de piedra, próximo y quedarse abstraído del entorno.
Los paseantes empiezan a desaparecer y la luz de las farolas se inicia. El pensamiento le lleva a un bautizo que presencio en una vieja iglesia hace muchos años. Todos los símbolos que se ejercitaron entonces y que pasaron desapercibidos a los presentes. Solo del pensamiento de un ingreso más, en la fe católica. Y la siguiente celebración en un bar próximo.
El espacio era también oscuro solo con la iluminación de tres velas y la treintena de personas, testigos del acto.
De repente la fuente dejo de manar agua y las ondas y burbujas fueron desapareciendo. Juan sale de su escena y se levanta hacía la salida. Las nuevas sombras toman su nuevo aspecto. Camina lentamente, sin a penas ruidos, salvo los de la calle fuertemente transitada, entrada y salida a la vez.
Un viento comienza a arreciar, como queriendo barrer la estancia, como si hubiera sido profanada. Sube la cremallera de su chaqueta, buscando reservar el calor interior. Ya en el paseo principal, las luces comienzan a parpadear. Afortunadamente es una recta lo que le separa de la puerta de salida. Por ello no se siente inquieto. Pera lo vieja puerta de hierro esta cerrada y comienzan a surgir todas las dudas que no había tenido. Toma un barrote y tira fuertemente hacía atrás la puerta cede fácilmente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

gracias por participar en este blog.