martes, 26 de diciembre de 2017

EL RABILLO DEL OJO




Juan piensa que muchas personas están en su mundo, pero es como si vieran, el actual a través del rabillo del ojo. Conectados pero con su vida interior activa. En el medio de transporte todo el mundo parece ir a lo suyo, sin embargo: no es así. En vagón de metro entra un músico dispuesto a interpretar una canción. Todo el mundo parece ignorarle, pero todo el mundo sabe de su entrada. Los ojos irán hacía él poco a poco, hasta mostrar la indiferencia por su presencia. No ha sido llamado y por tanto no es bien recibido. Otros pasan directamente de estación o parada.
Juan sabe que el mundo interior se llena de las relaciones sociales y parece que hay que evitarlas pues nos pueden contaminar. Por otro lado todos obramos de manera similar, somos calcos de modelos implantados en nuestras mentes. Al darse cuenta de ello, Juan decide romper el modelo a seguir, quiere utilizar su libertad de decisión. Piensa que existe un tiempo social, en el cual te tienes que llenar del mismo y un tiempo personal donde debes de hacer lo mismo.
Sabe que muchas veces es difícil conciliarnos, pero sino, nos quedaríamos algo cojos y nuestro caminar no será fácil. Cuando habla con amigos menciona está manera de pensar, pero no tiene mucha receptividad, pues es más sencillo seguir el camino de los demás que seguir uno racional. Parece como si los esfuerzos, cansaran y la comodidad es una de las prioridades que se está imponiendo en nuestra forma de vivir. Juan se siente un poco desplazado, pero no le importa, la decisión tomada. Es mejor ser consecuentes con la manera de pensar a la fácil que significa seguir el camino marcado por los otros. Tampoco crea un conflicto que pueda resultar erosionado o aislado.

lunes, 25 de diciembre de 2017

LA REITERACIÓN







La reiteración es muy socorrida en el caso de la publicidad, es necesario aportar más de un argumento para mostrar la bondad del producto a vender.
Parece como si se enseñara mas ventajas, indirectamente, crear una necesidad. Tenemos que crear, las mismas, para crear el consumo, fuente de la subsistencia de nuestra economía.
Paradojicamente, si en una conversación, surge la misma, suele interpretarse como un hostigamiento, una pesadez. A nadie le gusta tener que transportar cosas pesadas, pues cansan.
Curiosamente denostamos algunas cosas pero interpretadas en otros espacios se convierten en pilares, base de nuestros trabajos y relaciones.
Comprobamos como cambiamos la interpretación según se halle en un lado o en otro, aun siendo la misma en los dos puntos.
También afecta nuestro nivel de tolerancia para la interpretación. Por ello la flexibilidad de la recepción del mensaje de las otras personas puede ser clave para no generar conflictos. La elasticidad del junco con la dureza de la corteza de un árbol, ese nivel de tolerancia es la clave de la solución de conflictos y posicionamientos enfrentados.
Volvemos a querer tener la razón, como base de nuestra personalidad y sin embargo nuestra tolerancia va cambiando, según donde se produzca.. Comprender está realidad es uno de los argumentos principales de recibir al otro, como un compañero de vida, no como un enemigo. Ese otro solo es un espejo de nuestro pensamiento, de lo que no nos gusta de nosotros mismos y simplemente lo proyectamos en él. Si lo entendemos así, la situación cambia radicalmente, mejorando personalmente y por tanto la influencia sobre las demás personas. El entorno se modifica en un clima más positivo, por ello más fácil de crear una vida más agradable. Argumentos pequeños pueden ser una gran revolución en nuestras vidas y por tanto en este mundo general.

viernes, 22 de diciembre de 2017

EL ESCUDO DE LA RAZÓN




Para Juan siempre le ha parecido que tener razón te da la suficiente fuerza para vencer cualquier cosa. Ese escudo que te hace llegar a cualquier sitio. Esa autoconfianza con poder de despertar admiración en otras personas, es tan fuerte y significativo para poder pasar por encima de cualquier cosa. Sin planteamiento psicológico lo esgrime, como argumento ante cualquiera e incluso se encuentra envuelto en la bandera se la razón.
Juan no ha descubierto que la razón es relativa a la persona esgrimidora, solamente para ella, para el resto existen otras visiones o lógicas.
En Juan solo existe una única verdad, lo demás son descomposiciones de la misma y por tanto no puras.
Juan consigue ser un adalid de la misma, pero ello le lleva a muchas confrontaciones con otras personas de diferentes formas de ver la vida.
Hoy esta pasando por un paso de cebra, inmerso en sus pensamientos, obvia al vehículo que viene de frente. Resulta arrollado pero sin daños significativos. Se levanta como un resorte y va a encararse con el avasallador, por supuesto con el amparo de haber hecho las cosas bien.
. Juan comienza a gritar, consigue llamar la atención de más gente, con lo cual su foro puede reafirmar. Posiblemente unos moratones y dolor muscular sera la consecuencia del mismo. Llama a la policía para que la imponga una sanción. La muchacha, asustada, por fin habla, y pide insistentemente disculpas.
Juan armado de razones dice si no sabe frenar. La respuesta es simple el freno se quedo sin fuerza y no obedece a las ordenes del pie. Juan no la cree y va con ella al coche. Arranca a poca velocidad inicia la marcha. el pedal se hunde sin dar respuesta. El vehículo choca con otro aparcado. Juan sale pálido. Un policía espera allí.

jueves, 21 de diciembre de 2017

EL MUNDO ESTÁ EQUIVOCADO


Juan decide que el mundo esta equivocado, las maneras de concebir la vida no son correctas, por ello trata de alejarse de los demás, son seres apestados y llenos de programas maliciosos. Convertirse en anacoreta en una ciudad es una utopía pues necesitas de cosas que te ofrece la sociedad pero, por otro lado haces uso de vivir en la urbe. Usa la comida, el agua y la energía eléctrica. Pero en su bien interior existe un rechazo hacía todo. Cuando recorre la ciudad solo encuentra argumentos para seguir siendo como es. Juan tiene la verdad y por ello se protege de los otros. El sistema no es el ideal, cualquier muestra es una trampa para reafirmarse.
De su boca no fluyen palabras de agradecimiento, no tiene nada por lo que dar las gracias, cada vez más incluye argumentos para comportarse como es, el resto de individuos son seres vacíos atrapados en una red, en la que poco pueden hacer.
Se siente un ser asocial, pero convive de personas sociales. Olvida gestos para transformarlos en amenazas.
Poco a poco se va radicalizando más, abandona su empleo. Deja de pagar, la luz y la comunidad de vecinos. El tono de su voz se vuelve despectivo y va siendo gutural, a penas se le entiende, las veces que lo hace.
Va convirtiendo su casa en un cubículo. Reúne cosas para tirar a la basura, quiere necesitar lo menos posible. La higiene la va olvidando y su barba y su pelo se enmarañan como un enroque en el juego de ajedrez, buscando una autodefensa donde no hay frente, ni enemigo. Si no existen habrá que crearlos es su pensamiento. A penas baja a comprar alimentos, no quiere ver a otros seres. Las persianas permanecen cerradas, hasta el aire, molesta. Su corazón se detiene.

miércoles, 20 de diciembre de 2017

SIN SABER DECIR NO





Saciado de comer, Luis, se levanta de la silla. En su mente la sensación de haber cometido algo malo, ha ingerido mucha más comida que la necesaria. Una sensación de no saber contener sus instintos primarios le crea un desasosiego capaz de parar la iniciada digestión. Frente a él sus tres amigos, también participantes en la cena. Todos han comido mucho más de lo necesario y han ingerido el suficiente alcohol, para no notar la ingesta de tanto alimento. Va hacía el servicio con la necesidad de hacer algo de ejercicio y poder consumir alguna caloría en el trayecto y evacuar la vejiga llena de liquido. En un marco de complicidad todos se han visto a pedir excesivas cosas y varias botellas de vino.
El balance es un poco triste, la sobremesa se hace desvariada, con conversaciones que empiezan a sacar un grado de violencia oral.
Deciden pagar e ir a otro local para tomar una copa y algún café. Pero los ánimos están enfrentados y Luis decide renunciar, alegando que al día siguiente debe madrugar.
Una vez en la calle, se siente mejor, aun no sabe porque ha acudido a está reunión con estos amigos con los que casi no comparte ya, nada.
Luis siente como si su personalidad se diluyera y perdiera el control de las cosas, no ha sabido decir que no a la asistencia y menos a la comida y bebida consumida.
Decide ir paseando para ver si los vapores ingeridos, van diluyéndose, pero el trazado de la recta es bastante anormal, para ser una sucesión de curvas.
Se detiene junto a un árbol y quiere arrojar lo que no ha sabido negar.
Una sensación de bienestar empieza a entrarle según va soltando. Ahora su paso es más firme aunque haya llegado un dolor de cabeza.

martes, 19 de diciembre de 2017

EL VIRUS





Juan inicia su trabajo en una empresa nueva, mucho por descubrir y muchas cosas para acoplarse a unas nuevas directrices, hábitos y formas de trabajo.
Esta ilusionado pero a la vez expectante a como desarrollar su trabajo. Se presenta a sus nuevos compañeros y le indican su ubicación, es en un rincón interior sin luz natural. Coloca su abrigo detrás de la silla. Se sienta y espera que alguien le informe de que y como va a desarrollar su trabajo.
De pronto sale un hombre alto con canas en sus sienes y se dirige a él. Hola soy Luís el encargado de esta sección, me informaron que te presentarías hoy. ¿Puedes pasar a mi despacho? Juan de pie, le estrecha la mano y le sigue.
El despacho es austero con algún motivo personal, en la mesa de trabajo. Pero se dirigen a otra mas larga con diez sillas, elige una lateral, mientras Luis tomá la presidencial. La conversación es sobre su pasado laboral. Para empezar una exposición sobre la empresa a la que acaba de llegar. Parece un disco que pone a cada nueva incorporación y hasta el tono es monótono. Pide que interrumpa cuando quiera hacer cualquier aclaración o pregunta. Juan realiza varias para mostrar su interés en aprender más sobre su nueva empresa.
Las flores y los logros son lo que más se quiere remarcar. Aunque hay algún comentario que muestra diferencias con la dirección que se encuentra en otra provincia. Mientras enciende una presentación donde se muestra el equipo humano y las instalaciones. Las personas han cambiado y muchas no están, pero como es el material que tienen pues lo usan.
Descuidadamente Luis, pulsa una tecla equivocada y como si de un virus se tratara se deshace la imagen. Ocurre lo mismo en las otras pantallas informáticas.

lunes, 18 de diciembre de 2017

BUSQUEDA DE EMPLEO


Seguramente habrá llegado ya. Comenta María a su amigo Luis. Están hablando de su hermano que ha ido a otra ciudad en busca de un trabajo no encontrado en la ciudad. Llevó un par de maletas con lo imprescindible y tiene concertado un piso compartido, para iniciar su búsqueda, no tiene nada en mente por ello puede encontrar cualquier cosa o nada. Se inicio en la fontanería pero no le llenaba, además no supo venderse lo suficiente para poder subsistir. Vía Internet habían visto las posibilidades de allí. Pero hay que estar para saber. Tras instalarse va a la oficina de empleo. Y comienza a hablar con los que están en la cola. Las previsiones, según ellos, son muy malas, algunos acumulan varios años sin encontrar empleo estable. Una sensación de perdedor se apodera de él, Juan piensa que encima genera más gastos a su familia, se siente mal.
Pasea para identificarse con la ciudad y en pocos minutos sale de ella. Unas naves industriales indican el limite. Recorre las mismas y decide imprimir su curriculum y entregarlo mañana. Sabe que acabaran en una papelera pero hay que intentarlo.
Luego decide ir al piso y hablar con los habitantes, de vuelta compra algo de comida y una cerveza. La encargada es la dueña de la casa, que tras divorciarse y quedarse con la hipoteca decidió alquilar las otras tres habitaciones y poder seguir con su casa. Explica las normas y le indica un sitio que necesitan gente de manera temporal. Señalando en un plano como llegar. Juan lo agradece y marcha temprano a la mañana siguiente.
Accede a la nave y una carretilla elevadora, marcha atrás, se topa con su cuerpo, cae al suelo y siente un profundo dolor en su hombro, mientras sangra por la ceja.
¿Como no miró?

viernes, 15 de diciembre de 2017

LA DULCE ESPERA



Juan mientras espera la llegada de María, ha entrado en una pastelería y ha comprado una sabrosa palmera de chocolate. Hace calor y la servilleta con la cual sujeta la misma, se ha pringado. Como puede va dando mordiscos, mientras espera sentado en un banco. Poco a poco su mano y cara comienzan a ser pintados de un color marrón.
Es la segunda vez que ha quedado con María, ha cuidado su forma de vestir y hasta ha incorporado colonia a su cuerpo. Pero ahora todo parece arruinado, Manchado en exceso, decide depositar en una papelera. La servilleta ya no puede acoger mas manchas y lleva el mismo destino. Y ahora, ¿qué?
Al fondo del paseo ve una fuente, es la solución, todo volverá a su sitio. Es su pensamiento, acelera sus pasos y observa que no hay rastro de agua en el desagüe, quizás el calor allá evaporado el mismo. Pero al apretar el botón nota el vació de no salir nada. ¿y, ahora?
Busca una papelera para encontrar un papel que pueda tomar como un limpiador, pero están vaciás. La corteza de algún árbol puede ser la solución, pero no absorbe lo suficiente y menos todo el contenido de las manchas en brazos y cara, sin contar las pringosas manos.
Alternativa que surge en la cabeza ir al servicio de algún bar. Comienza la busqueda y no tiene, mucho tiempo por hallarlo. En frente un luminoso indica a que se dedica el negocio.
Da las buenas tardes y pide una cerveza, gira la cabeza y ve la señal indicadora de los servicios. Entra en el de caballeros y no hay agua, ni tampoco papel. Parece que todo se tuerce. Sale y pasa al de señoras, abre el grifo y aparece la preciada agua. Mojado sustituye la suciedad impresa.

jueves, 14 de diciembre de 2017

LA ESPERA DE LA ARAÑA





De animales, podemos aprender muchas cosas que pueden ser extrapoladas a nuestro genero. Como la espera de una araña a que llegue su presa y se enrede con la tela pringosa por ella elaborada. No tiene tiempo, ni su aparato digestivo le producirá una sobrecarga de ansiedad o tensión. Llegar el momento, en el cual, otro insecto caerá en sus redes y se podrá alimentar. Nosotros dotados de un intelecto superior conseguimos, en una situación análoga, Desesperarnos e incluso, si ha trascurrido muchos días ir a otro lugar y comenzar la nueva elaboración.
Ese conocimiento que nos hace elaborar o racionalizar escenas, presentes o futuras, puede llegar a ser nuestro enemigo. En esa creación podemos desesperarnos, deprimirnos o actuar violentamente contra todo, perdiendo nuestro control.
Nuestro cerebro marca unas prioridades y estas. no se pueden saltar por ello nuestro comportamiento se vera influido por ello.
Los animales también tienen prioridades como la de supervivencia pero su cerebro no desarrolla mas comportamientos como puede ocurrir en el hombre. Estudiar como conocernos mejor va implícito a la observación de la naturaleza, ella es la llave del comportamiento nuestro, en ese aprendizaje, podemos aprender como superar sensaciones o sentimientos que creemos no poder modificar y como consecuencia recurrimos a la industria farmacéutica para solucionar ese aprendizaje. Una simple hormiga, una brizna de hierba nos pueden enseñar mucho porque son parte de nuestro entorno de nuestra conciencia universal.
Vivimos una época de prisas, tenemos el síndrome de no perder el tiempo, para cuando lo tenemos no sabemos como emplearlo. Mientras la araña, agazapada en un rincón, espera la llegada de una presa para poderse alimentar. No necesita saber la que ocurre en su país para esperar su momento. Nosotros seguimos corriendo y nos sentimos superiores, a la vez nos inoculamos veneno.

miércoles, 13 de diciembre de 2017

LA FUENTE DE LOS BANCOS PENSANTES









La fuente del parque, es pequeña, tiene la forma de una pila bautismal. Está situada en la zona norte. Por allí no suele ser un sitio frecuentado. Pero a pesar de tener cien años, tiene su leyenda, no demasiado difundida. Cuentan que junto al banco ubicado al lado de la misma. Allí todas las tardes durante un año iba una mujer y se sentaba a escuchar el rumor que produce el agua cayendo por los laterales, produciendo un sonido monótono e hipnotizador, por tanto. Esta mujer, Isabel, va a llorar la perdida de su amor con Mateo. Se sintió muy infeliz cuando rompió su compromiso con ella. Con lagrimas iba todos los días a sentir como las mismas se diluían en el agua y se sentía mejor. Por ello asistía todos los días, durante una medía hora. Todos los paseantes del parque la veían a la misma hora en el mismo sitio, con la vista fija en la caída del agua.
Justo cuando cumplía un año, la mujer dejó de ir. Dejando como una ausencia en el lugar, se había convertido en parte del jardín durante la media hora a las cuatro de la tarde.
Se especulo mucho sobre la visita de esta mujer, pero nadie entablo conversación con ella. Solo notaban con la tristeza con que llegaba y la sonrisa con la que salía. Por ello se la empezó a aplicar poderes mágicos y otras personas comenzaron a imitar las visitas. Y empezaron a sentir igual estado de animo. El rumor comenzó a multiplicarse y el entorno, antes que pasaba desapercibido, se llenaba de personas solitarias que se sentaban en el banco para mirar la fuentecilla. No se sabe porque, pero todos salían con una sonrisa dibujada en su boca.
Incluso se aumentaron el numero de los bancos pensantes.



martes, 12 de diciembre de 2017

SIN ESA NECESIDAD





Juan se pregunta por la eterna lucha, del ser humano, por ganar. Es necesario vencer e incluso humillar al otro, ese que esta fuera de uno mismo. Va pensando en estás cosas, cuando recibe un empujón por poder pasar el torniquete del metro para acceder al anden. Sabe que son muchas las situaciones en que se producen situaciones de competición. Una vez que es consciente va a intentar darle la vuelta, no tiene esa necesidad, parece que muy importante para nuestro ego. De dejarse perder. Si el otro quiere o necesita ganar, no hay problema, él facilitara esa situación. No va entrar en lucha, hoy no necesita reafirmación, pero va a anotar en una libreta todas las situaciones en que surge, esa necesidad.
Al final del día, las analizara he incluso se dará cuenta de la gran cantidad de situaciones en las que surge esa competición.
Juan habla con su amigo Luis y le hace saber esta situación, tan normal, que sin darnos cuenta ocurre continuamente. Esa necesidad de vencer en muchas situaciones de nuestra vida. Luis responde que no lo había pensado, pero es verdad que ocurre a cada momento, independientemente de las personas y el contexto donde ocurran.
La necesidad de reafirmarse como vencedor. Juan explica la necesidad de ser vencido para que la otra persona consiga sus logros, incluso se da cuenta que esto ocurre, la otra persona se da cuenta que no existe esa necesidad de vencer. Es como ceder el paso a una persona ante la entrada, o salida de una puerta. Surge la reflexión de entender que dejar pasar es un acto también de ser magnánimo. Pareciendo lo mismo pero sin ser igual. Como el sabio que no necesita demostrar su conocimiento, ya tiene los valores suficientes para estar mostrando continuamente. Sin esa necesidad.

lunes, 11 de diciembre de 2017

SOBRE DIOS





Los hombres siempre han querido hacer dibujos, esculturas y hasta arquitecturas para representar la imagen de Dios.
Una profunda necesidad de materializar algo que no tiene sustancia para trasladarlo a nuestro mundo de realidades tangibles. La profunda necesidad de entender, posiblemente, con el diccionario en la mano, para poder trasladar a un lenguaje entendible, algunos conceptos abstractos, como la palabra Dios.
Luego llegó la apropiación del concepto en forma de imágenes, intentando imponerlo a los demás para mostrar su superioridad y de paso enseñar que Dios, está de su lado.
Se construyeron templos para albergar el lugar donde comunicarse con él. Como consecuencia de las imposiciones, llegan las muertes, los tormentos y los sometimientos en nombre de una abstracción. Impidiendo la libertad de no tener que demostrar a nadie que estás con él, sin necesidad de luchar por nada ni por nadie, para sentir el sentimiento de su forma y su agradecimiento en forma de lo único que contamos en su forma más real: “vida”. Sin necesidad de enfocarlo en una persona en concreto, pues sino tendría los defectos de todas las mismas. Se convertiría en uno más. Le podríamos acusar de hacer oídos sordos a nuestras preguntas e incluso a nuestras rogativas. Decepcionados perderíamos el concepto abstracto y romperíamos imágenes como las responsables de nuestras, propias frustraciones.
En esa anarquía destructora nos declararíamos, ateos y fácilmente, pasaríamos al siguiente paso, lo único valido es lo material. Cambiaríamos una imagen por un billete, unas monedas o una tarjeta bancaria. Y vuelta a empezar, con la diferencia del cambio de modelos.
Alguien dijo que es más fácil cambiar de religión que de alimentación. Por ello es sencillo cambiar los valores, unos por otros. Solo en los prolegómenos de la muerte surge el miedo al más allá, pero por saber que está.

viernes, 8 de diciembre de 2017

EL SEISMO





Cuando se acercaba el día, la oscuridad deja paso a las primeras luces. Un tanto dudosas. Las sombras se convierten en las reinas del nuevo periodo y el trasnochar deja de tener sentido. Según van llegando los nuevos minutos. El telón se va subiendo poco a poco y va descubriendo un panorama diferente.
Las farolas van apagándose y acoge, a los más madrugadores, en busca de sus vehículos o medios de trasporte. Los más afortunados llegan a su destino andando. Los panaderos han terminado su jornada y vuelven a sus hogares.
Algún chico joven regresa a casa, parece un intercambio en el día de fiesta.
Las paredes de ladrillo o cemento toman unos tonos diferentes a los que lucirán cuando está el sol.
La fuente, instalada en la rotonda de la intercesión de calles, comienza su cantarina caída de agua.
Las voces sustituyen a los susurros, más matinales. Muchos aprovechan a girar sobre si mismos, en sus camas, para alargar la hora de ponerse en pie.
Las churrerías y las panaderías abren sus comercios, en busca de los clientes más tempraneros, compiten por ofrecer su genero, en busca del intercambio de dinero que les llevara a poder pagar los gastos que genera la apertura de su local comercial.
Pero hoy es diferente un movimiento sísmico asusta a la población que sale a la calle en busca de la seguridad del espacio abierto huyendo de un posible enterramiento.
Algunas alarmas comienzan a sonar, a pesar de su prohibición y la calle se llena de durmientes, asustados. Algunos han recogido algo en bolsas que sacan a la calle. Han sido dos temblores, el segundo ha pillado a muchos ya en la calle y recogiendo lo imprescindible. En las calles se ven algunas grietas llevadas a cabo también en paredes de los edificios.

jueves, 7 de diciembre de 2017

LA DEPENDENCÍA DE JUAN





Juan es un joven, en torno al cuarto de siglo. Los diferentes avatares le han permitido estar en una situación de tomar las decisiones que otros le dan, así no se equivoca, no tiene miedo al ridículo. Una de las cosas que más le exasperan es parecer un pelele, sin embargo, ha sido una vida llena de decisiones tomadas por otros. Ha situado su zona de confort en ese punto que le da miedo decidir, nuevas empresas, nuevos viajes, todo lo que el no tenga planificado.
Los estudios los eligió en base al criterio de sus padres, evidentemente es un hijo ejemplar que no da disgustos y tiene un sentido plano de su vida lo cual, tiene sus pros y sus contras. Los pros se resumirían a nivel de los demás pero a nivel propio genera un sentimiento de impotencia.
Cada día se encuentra más inferior a los demás. Todo esto desencadena una sensación de desasosiego, de angustia, que le lleva a episodios de parálisis. La solución esta en ir a un médico que le manda diferentes pruebas para descartar un problema físico. Los resultados indican que no lo hay. Por ello se le remite al psiquiatra, allí lo solución son psicofarmacos y esperar a ver como evoluciona. La farmacia le deja en un estado bastante vegetativo, donde pierdes la noción del tiempo por un espacio adormilado. El paciente no tiene los episodios por los que acudió a consulta, por ello, se piensa que esta mejor: Se ha solucionado el problema, prueba conseguida. Juan se encuentra en la misma realidad pero mas dormido, físicamente. Piensa que su estado no tiene solución con el resultado de empezar a caer en otro nuevo, llamado depresión.
Juan sin moverse va cambiando a peor. Pero encuentra la comprensión de sus seres queridos, tiene bastante.

miércoles, 6 de diciembre de 2017

LA ESCALERA DE LUIS





Luis siempre va con una pequeña escalera, de dos peldaños, plegable, aluminio blanco a todos los sitios. No es que se sienta bajo que si lo es.
Una vez que el cansancio llega a su cuerpo, abre la misma y le vale de asiento. Tantas veces ha esperado en colas, que su apéndice metálico le vale para llevarlo de una forma más descansada. Pero una mano siempre ha estado ocupada en portear, la misma.
Ha utilizado mil maneras en mil situaciones diferentes. Todo el mundo le parece ser un ser extraño y raro. Pero la respuesta es ignorarles. Poca importancia tienen las criticas hacía su actitud. Ha sabido sacar el uso, que otras personas ni se lo imaginan, como no tiene que justificar. Él al final del día anota las utilidades que ha usado la escalera. Pero la tragedia hoy ha tenido lugar al ponerse debajo de las ramas de un olivo, para recoger su preciado fruto. Con la ayuda de un palo ha vareado para obtener las aceitunas, pero en una contorsión, forzada, en busca de una rama superior a creado una inestabilidad y la consiguiente caída. Su inmovilidad hace que se detengan paseantes para interesarse por él. En cinco minutos una ambulancia aparece, hacen una movilización para ver el estado del herido y se procede a llevar al hospital, para descartar roturas. Según le van ascendiendo al vehículo, solicita que cojan la escalera
Un camillero hace muecas pero la recoge y la pone donde la camilla.
En urgencias se hace la correspondiente exploración y se pide corroborar con unas placas de rayos X.
Un enyesado en el brazo es el resultado de la visita. No se olvida de pedir su escalera, pero una de las patas se ha doblado y decide abandonarla en los contenedores de basura proximo.

martes, 5 de diciembre de 2017

LA SALIDA ESTÁ ROTA




La salida está rota, se trata de una salida de una boca de metro. Tras un hundimiento en la calle, quedo taponada la misma. Por ello todos los usuarios deben acceder, por la otra boca de entrada, esto supone dar una considerable vuelta. Lo que crea un malestar. En realidad, el desprendimiento afecta a la mitad del paso. Pero se ponen unas vallas para evitar el paso por allí.
Los días pasan y siguen sin arreglarse y las obras están paradas. Comienza un malestar entre los vecinos que no quieren más tardanzas. Y son un grupo de chavales que dejan abierta la verja que impide el paso y pasan para acortar el camino hacía el vestíbulo.
Una vez superado esta entrada hay un largo pasillo que comunica con la entrada al metropolitano. El mismo esta oscuro pues las luces están desconectadas. Pero ellos se arreglan con la luz de sus teléfonos móviles.
La escena no pasa desapercibida a los viandantes que ven como retirando la valla que impide la entrada en los dos sitios se puede llegar a acortar el camino. La oscuridad se puede solventar con la luz telefónica.
Tímidamente, más personas, toman el mismo camino, hasta hacerlo la salida normal. Los cascotes y la tierra caída no son obstáculo para tomarlo de nuevo. Salvo las personas mayores y mujeres temerosas de pasar el pasaje oscuro.
Un vecino solicita que se de la luz al pasillo. Respondiendo, muy radicalmente, que es una zona de obras y está cortado. Vuelven a colocar las vallas en su lugar, pero tardan poco tiempo en ser retiradas.
El pasillo iluminado por multitud de lucecitas, clama por una solución. Y se deciden poner quejas. Van engrosando el numero, pero no existe reparación a corto plazo. Palas y escobas surgen para adecuar el pasillo ampliándolo.


lunes, 4 de diciembre de 2017

LA SORPRESA






La sorpresa, es que no hay sorpresa. Así se manifiesta Luis, su pensamiento es: “la vida ya es de por su si una sorpresa, queremos sorprendernos porque unificamos todo haciéndolo monótono, está, a su vez, da tranquilidad y nos permite estar en un estado de paz. Pero al acostumbrarte a esa paz, llega el aburrimiento. Necesitamos algo para estar despiertos. Par que la vida tenga un significado y no una insulsa, sucesión de palabras".
Luis se dio cuenta de está situación y de la necesidad por tener sorpresas o estimulos que logren apreciar todo cuanto tenemos. Y esa eterna lucha por buscar, precisamente, lo que no tenemos. Por ello contradictorio, poseemos doce cosas y ansiamos la numero trece y así sucesivamente.
Luis pensó en difundir la cultura del agradecer lo tenido, desde la simple o compleja, según se mire, vida. Y a partir de allí construir una estructura diferente. De tal manera, en que la impresión sea nuestra realidad, normal y corriente. Pero bella y magistral a la vez.
Luis explica que el entendimiento del cuerpo humano, lleva siglos y cada vez entendemos menos nuestros sentimientos y reacciones. No esta allende los planetas ni siquiera los océanos, está más cerquita en nosotros mismos. Eso no tapa nuestra investigación hacía más cosas, pero no es necesaria la búsqueda del estimulo, para encontrarnos bien.
Esa sorpresa que marca Luis, como una necesidad, del ser humano, para encontrarse a gusto y dando sentido a la vida. No se encuentra en lado material de las cosas, sino el que el lado inmaterial, materialice las cosas.
Encontrar las palabras para que el entendimiento de este mensaje, le lleva a dar una serie de charlas, por varios foros. Donde hace plantar la semilla, puede que germine o se quede aislada en su mundo. Los asistentes eligen.

viernes, 1 de diciembre de 2017

CASI SIN DARSE CUENTA





Los errores en los demás, son más fáciles de ver y criticar, así comenta, Luis a su amigo Ángel.
Si incluso se pueden formar bandos para defender cualquier decisión, es simple, el colocarnos en una y además afianzarnos como si nos fuera la vida en ello. Porque una vez metido la pata, lo único que puedes hacer es afianzarte, sino pareces un ser voluble y de alguna manera veleta. Responde Ángel.
Normalmente no te paras a analizar la insensatez que sale, de la decisión tomada en un momento dado. Parece justo el seguir por el camino iniciado. Al contrario que es rectificar y tomar el más racional. Apunta Luis.
Es tan importante, parecer recto en la toma de decisiones, que se puede disculpar a la de seguir empecinado en un discurso, en el que no crees, pero llenas de argumentos para justificar la decisión tomada. Mientras Ángel mirá a los ojos de su amigo.
Cuantas sinrazones justificamos sin creer en ellas. Quizás la frase más bonita es pedir perdón o un lo siento, para reconocer nuestra elasticidad par afrontar cosas. Al otro lado de la cafetería. Una discusión se produce entre un cliente y el camarero. Observan como dos espectadores y van encontrando argumentos para el dialogo que tienen entre ellos. Al volverse, Luis, para seguir la escena, golpea con el codo un vaso de cristal, cae al suelo y se hace añicos. Se levanta y va hacía la barra para pedir una escoba y un recogedor. El camarero interrumpe la discusión y le dice: “No se preocupe en un momento iré yo”. La discusión se interrumpe, mientras el cliente se ve frustrado, quería haber seguido, tal vez, con la intención de encontrar petroleo en ese pozo que habían escavado y tanta arena han sacado. Casi, sin darse cuenta ambos.