EL ANCLAJE DEL PASADO

Como siempre, sale de su casa cabizbajo, no mira hacía arriba, le da igual el día que hace.
Esta preocupado por muerte de su mujer, cada momento recuerda cualquier situación que vivió en su compañía. De que le vale ver el dibujo en el cielo si él, tiene sus recuerdos, nadie le va ha hacer cambiar.
No se acuerda de las discusiones que tenían a diario. El había tenido una pedida y por tanto es más pobre, a nadie le gusta estar en la escasez. Por ello comenzó a rescatar imágenes del pasado y las fue dando un matiz glamuroso.
Según pasan los días llena de más recuerdos.  Su Mente se siente más rica, cada vez tiene más gracias a su pasado. Le hace encontrase cada día más lleno. Cubre sus necesidades diarias pero su hemeroteca de datos y de imágenes esta llena. La carencia no tiene sentido, pero esto le hace esta más abstraído, a penas se comunica con nadie pues se encuentra bien en su fortaleza.
Hoy ha salido de casa para ir a comprar, al salir del portal su cabeza se fija al suelo, no tiene necesidad de lo que pasa a su alrededor, un supermercado es el destino. Unas gotas de lluvia hacen que su camino se convierta en una humedad donde los ríos se multipliquen en todo su cuerpo, no acelera su paso y al entrar en el establecimiento, comienza a dejar un reguero de agua. Una mujer que esta en recepción le ofrece unas servilletas de papel, pero son rechazadas, no necesita la ayuda de nadie, faltaría más.
Una vez realizada la compra, paga y va hacia la salida, no mira a quien le ofreció su ayuda. El agua acumulada forma un charco, que le hace resbalar, lo que ocasiona una caída aparatosa circense.