Alberto llevo un par de años que
todo se me complica, siempre aparecen cosas externas a mí, de otras personas. Que
modifican la vida que yo quiero o hago.
Mira Juan es verdad que cada vez
que nos vemos me relatas cosas que suceden a otros pero en las cuales, tu estás
involucrado.
No te imaginas de lo harto que
estoy de pasar todas estas cosas.
Tu, Juan, imagínate, que en vez
de tener un coche pequeño, tienes una furgoneta grande. Tú eres una persona muy
popular, por lo tanto tienes muchos amigos. Por ello cada vez que ellos
necesiten transportar algo voluminoso, a quien van a recurrir. Lógicamente a
ti.
Ya, Alberto pero piensa que no se
decir que no, porque sino pienso que me he convertido en un egoísta, y eso ni
se me pasa por la cabeza.
Pero no se es más egoísta que
dañarse a uno mismo. Tu tienes unas capacidades, pero siempre hasta un limite,
si las sobrepasas, te llegas a encontrar mal.
Si así es.
Pero ahora tienes que retomar el control
de tu vida, lo importante no es la ayuda a los demás, sino uno mismo. Eso no es
egoísmo, es quererte y demostrarte amor. Sino, es como si te colocaran de
felpudo a la entrada de una casa un día, de lluvia. Entiendes, no ayudas cuando
a ti mismo no te ayudas. Tu furgoneta es muy grande y puedes con cualquier
cosa.
Si es verdad que, a veces me
siento así. Pero con el paso del tiempo me voy sintiendo más vulnerable.
La vida te va enseñando, maneras
de afrontar las cosas y sin embargo, como respuesta, nosotros cerramos los
ojos, para no querer ver. Entiendes Juan.
Claro que lo entiendo, pero como
hacerlo.
Empezando a decir que no a
alguien, puedes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
gracias por participar en este blog.