LA RED

Juan comenta con Ángel como una noticia aparecida en cualquier medio, se transforma en una verdad, de tal manera que las verdades son expresadas a través de las noticias, que recibimos todos los días.

-En efecto, responde Ángel, tenemos una gran manipulación de la manera de entender la vida, pues se adapta a patrones externos y si esa noticia la encontramos en otro difundidor, entonces ya es una Biblia.

 -No damos la importancia que esto tiene, pero si profundizamos podemos sentir borreguitos que solo cumplimos la vida diseñada o creada por otros, enfatiza Juan.

-Puede resultar de ciencia ficción pero esta ocurriendo. A Internet se le llamo la red, pero realmente es eso mismo con la capacidad de atraparnos. Pensamos que tenemos mas accesos a información, es verdad, pero tiene un peaje por estar en él.

-Es difícil salir de él, pues sería como marginalizarte de la sociedad, no se trata de ser anacoretas para no estar en la red o malla o como quiera que sea. Juan acaricia su perilla, como queriendo dar más peso a sus afirmaciones.

-Nos sentimos libres, pero a la vez es estar en una jaula de oro, da igual los materiales o los utensilios que tenga dentro de ella, siempre seguirá siendo una cárcel. Responde Ángel con la cara mirando hacía abajo, en modo reflexivo.

-Por encima de todo soy optimista porque creo que es cuestión de descubrir nuestro poder interior, ese que no nos tiene que dar nadie, ni ninguna institución. Ese que nos hace libres y fuertes. Es cierto que es más fácil dejarte llevar por la corriente, social, pero al final llegaras a destinos no queridos y eso, siempre, nos hace encontrarnos mal. Por ello nadar o caminar, según el gusto de ejercicio, es tan importante para ir a tu destino.